Al escuchar las palabras de Shaun, Jenny se comportó como si hubiera renacido. Se liberó de las ataduras de Shaun y gritó.
—Hmph, mi cuñado está aquí para salvarme. ¡Estás acabado! Será mejor que me dejes ir ahora y huyas. De lo contrario, ¡mi cuñado definitivamente te dará una lección!
Pero Shaun volvió a abrazar a Jenny. Esta celebridad femenina, conocida por tener la mejor figura de la industria del entretenimiento, había despertado el interés de Shaun.
No le preocupaba en absoluto la llegada de Jordan. No había manera de que dejara de probar la deliciosa Jenny.
—Hmph, Jenny, ¿realmente crees que le tengo miedo a Jordan? Fingí tenerle miedo durante los últimos seis meses porque necesitaba su ayuda. Pero ahora, aunque te lleve a ti y a Liza Shelby delante de él, ¿qué puede hacerme? Bajemos juntos. ¡Te dejaré ver por ti mismo si le tengo miedo a Jordan!
Con eso, Shaun agarró el brazo de Jenny y la condujo a ella y a Liza Shelby fuera del avión.