Kapitel 18: 16
Después de su primera vez Jungkook había estado actuando de una manera distante.
Siempre le decía que estaba ocupado con un proyecto de diseño de la academia y que había estado trabajando en un Starbucks por jornada completa los fines de semana.
Le deprimía. Se sentía usado.
Él de verdad amaba a Jungkook y su corazón dolía por esa distancia. Se hablaban y se miraban con amor pero habían disminuido su tiempo juntos.
Fue el mes más doloroso que alguna vez pasó en su vida. Le jodía no saber lo que estaba pasando. Tampoco habían vuelto a tocarse descaradamente. Jungkook parecía estar en otro mundo, siempre estaba ocupado escribiendo notas en su cuaderno negro y se la pasaba escuchando canciones depresivas y amorosas. Su sonrisa ya no era amplia, su ánimo había decaído y no sabía que le pasaba a su novio.
Cada vez que le preguntaba sobre qué le pasaba él evadía su pregunta e inmediatamente cambiaba de tema. Taehyung no insistía y le daba todo su apoyo.
Jamás pensó que Jungkook le estuviese siendo infiel, no era posible. Simplemente nunca lo consideró, no de parte de Jungkook.
También se había convertido en una persona reservada en cuanto hablaban de su familia, jamás daba comentarios y ahora que llevaban cuatro meses jamás había escuchado acerca de su familia o algo sobre presentarlo a la familia Jeon.
En parte le decepcionaba porque la familia Kim ya consideraba a Jeon como parte de la familia. Pero estaba seguro que era una relación cualquiera, era obvio que Jungkook no lo iría a presentar como su novio.
Pero estaba cansado de darle vuelta al tema, él tampoco sonreía frecuentemente y cuando se reunía con Jeon, simplemente se quedaban disfrutando en silencio.
El silencio era cómodo pero extrañaba los piropos sucios y los apodos melosos de su novio.
Por eso era que ambos disfrutaban de sus cuerpos unidos en un abrazo, acostados en la cama mientras veían una película random.
Taehyung se estaba quedando dormido encima del pecho de Jungkook, su calidez lo tranquilizaba y le daba paz.
Se sobresaltó al sentir el tono de llamada de Jungkook. Jeon contestó rápidamente, levantándose. Su expresión estaba horrorizada y sus manos temblaban visiblemente.
—¿Q-Qué ha ocurrido?— lágrimas caían de sus ojos.—Es-Estaré ahí en diez.
Taehyung se levantó y abrazó a su novio, sintiendo como este lloraba contra su hombro.
—¿Qué pasa, mi amor?— preguntó dudoso Kim.
—Ti-Tienes que acompañarme... Ya es momento.
—¿Momento de qué...?
Jungkook se separó del cuerpo de su novio, y se alejó por la puerta.
—Te-Te espero abajo...
Taehyung se cambió rápidamente sin dudarlo y corrió hasta la planta baja, su novio hablaba con su madre quien también tenía sus ojos llorosos dedicándole una cálida mirada a su novio.
—Suerte cariño, iré más tarde. Debo esperar a ese hombre.— se refirió a su esposo.
—Muchas gracias, Somi, significa mucho para mi.— la madre asintió y señaló a Taehyung que lo esperaba nervioso.
Jungkook caminó hasta la salida, Taehyung siguiéndole.
Se subieron al auto, Taehyung no comprendía nada. Su corazón le daba un mal presentimiento.
Jungkook manejó en silencio, su ojos sin brillos y con una mirada perdida.
—Jungkook, cariño.— lo llamó dulcemente cuando el semáforo señaló rojo. Jungkook lo miró, sus ojos reflejando un poco de brillo.
Taehyung le besó dulcemente y sus ojos volvieron a soltar más lágrimas.
—Te amo.— le agradeció Jungkook y avanzó con el auto.
Llegó hasta lo que reconoció como la casa de Jungkook. Ambos se bajaron del auto y el pelinegro frenó antes de ingresar.
—Papá no está bien.— limpió sus lágrimas e ingresó a casa, seguido de Kim.
Entró a una habitación grande donde había una cama King size en medio, y en ella había un hombre bastante joven.
—Papá.— habló Jungkook y se acercó hasta abrazarlo, arrodillado en el suelo.—Por favor, no te vayas...
—Oh, pequeño... Creo que ya es hora de irme, además, veo que tienes un lindo chico a tu lado.
Taehyung se encogió en su lugar y Jungkook lo llamó con su mirada.
—Él es Kim Taehyung, mi novio, el chico del que siempre te hablaba.
—Buff, desde que tenías ocho años. Siempre teniendo que soportar tus lloriqueos de niña.— rieron dulcemente.
—Eso no es verdad...— gimoteó.
—¡Claro que si!— a pesar de tener Leucemia mieloide aguda, parecía no tenerla. Estaba bastante avanzada su enfermedad, casi intratable. Había un porcentaje muy bajo de que llegase a sobrevivir. Y por ello se estaba preparando para abandonar el mundo, no estaba seguro si llegase a sobrevivir por el tratamiento. No quería dejar a su pequeño Jeon en este mundo tan cruel.
Jungkook negó divertido y acercó a Taehyung con su mano.
—Él es papá. Tiene leucemia mieloide aguda; se lo diagnosticaron hace cinco meses y me enteré hace dos mes aproximadamente. La enfermedad va demasiado rápido, he estado trabajando en juntar el dinero para papá. Lo he conseguido pero no sé si vaya a sobrevivir. Por ello te he traído hasta aquí, para presentártelo. No podía soportar la idea de que te encariñases con él y sufrieseis por ello, por eso te lo presento ahora y no antes.
—Am, hola señor Jeon... Soy Kim Taehyung, novio de su amado hijo.— su sonrisa sincera y sus ojitos brillosos.
—No creía que fueses tan lindo chico. No me creía las palabras de Jeon porque siempre prometía que eras el ser más bello del universo-
—¡Papá!
—Era como un loro, nunca se callaba. Siempre tenía algo que decir sobre ti.— Taehyung sonrió enternecido.—Te veo y presiento que eres un buen chico... Si me voy de este mundo... Cuida de mi Jungkook. Ambos cuídense, son tan jóvenes, tienen una larga vida por delante.
Su voz deteriorándose cada vez más.
—Espero que sean tan felices como yo espero... No sean estúpidos para cagar esta preciosa relación y si alguna vez se les ocurre terminar la relación, recuerden que vendré del infierno para abrirle los ojos y demostrarle lo mucho que se aman.
Jungkook se acostó en la cama y se abrazó a su papá.
—Pa-Papá por favor, aguanta... Queda tan poco, necesito que estes para cuando me case con Tae...— sonrió risueño.
—Lo intentaré hijo...
—El tratamiento comenzará dentro de poco... Debes soportarlo papá, o si no bailaré cumbia en tu tumba.
—Oh, mierda. No me dejas opción, pequeño conejo malvado.
Taehyung llamó la atención con su tos fingida y habló pausadamente —: En caso que usted no esté, yo cuidaré de su hijo. Prometo amarlo hasta el fin de mis días... Lo prometo.
—Me llena de orgullo que una persona tan bella como tú le corresponda a mi hijo, se ven tan lindos juntos... Prometo estar para su casamiento, tórtolos...
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