En medio de una sala oscura, las pantallas brillaron mostrando la superficie de lo que sería una nave de carga.
En otras pantallas se mostraban señales de robots y otros preparativos, mientras a la vez se revelaba como las nubes púrpuras que conformaron la anterior tormenta se movían para volver a unirse, dirigiéndose a un destino desconocido.
"Esto es extraño…" Murmuró una mujer cuya voz fue seductora.
Era una mujer morocha con una figura que sin duda atraería la mirada de cualquiera, y que solo podría describirse como 'despampanante'.
Utilizando un vestido revelador su escote estaba a la vista y su cabello rojizo que caía por sus hombros le dio un encanto que era capaz de atraer hombres y mujeres por igual.
Elinarah observó con calma las diferentes cámaras de las dos señales en la que pusieron trampa.
Entendía lo que representaba esa tormenta purpura y sabía que significaba el movimiento, pero el problema fue que, al ser realizado en este momento, resultaba extraño.
"Los bárbaros serán capturados. Desconocen el peligro al que nos hemos enfrentado." Declaró una voz que venía de todo el lugar de la sala.
Elinarah dio una sonrisa encantadora que seguramente haría creer a la otra parte que estaba en lo correcto.
Sin embargo, por dentro estaba pensando que estaba subestimando a los humanos.
La 'tierra' tenía humanos que no solo resultaban poderosos, sino que había demasiado misterio y su tecnología no se quedaba atrás con respecto a este mundo… No, tal vez era mayor.
Después de todo, un 'Dios' de la 'Tecnología' había otorgado a la humanidad un 'Sabio'.
"Se han detectado inestabilidad espacial…" El aviso apareció en la sala y Elinarah observó una de las señales.
En el cielo de la señal dada por una nave de carga de gran tamaño que estaba oculta bajo tierra, el espacio se distorsionó y en ese lugar apareció una mujer llevando una túnica blanca de sacerdotisa.
La Cardenal Najjar solo dio una mirada para darse cuenta de todo lo que estaba a su alrededor.
"Comenz…"
Antes de que la voz pudiera decir algo, la mujer levantó su mano y desde la tierra la nave de carga se elevó.
Literalmente la nave de carga que era bastante grande se elevó al cielo con tan solo un gesto de la mano de la otra parte y al momento siguiente también lo hicieron las torretas que estaban por los alrededores.
"Maldición. Es una monstruosidad."
La voz dio su comentario y Elinarah dio una sonrisa al ver como robots exploradores salían de la nave carga.
Eran de esas esferas con tentáculos y si bien era sorprendentes, a quien se enfrentaba era un rango SS que era capaz de manejar el poder de un 'Dios Primordial'.
Por supuesto, esa voz seguramente no creería en un dios o algo de ese estilo, ya que seguramente estaba atado a la ciencia.
Lamentablemente esa mujer no era una broma y su capacidad tampoco lo era.
"…"
Decenas de robots exploradores salieron de la nave tratando de disparar, pero ninguna bala pudo ni siquiera golpear su barrera personal.
Luego los artilleros láser aparecieron de los alrededores y esos robots de cuatro patas dispararon sus láser al mismo tiempo.
Sin embargo, antes de golpear a la Cardenal Najjar, los láser golpearon a los mismos robots cuando el espacio se torció de una forma misteriosa.
"Necesitamos eliminarla ahora. Enviaré a todas las unidades." La voz por fin se dio cuenta de la amenaza.
"Ella parece estar queriendo tomar la nave, tal vez para robar la tecnología." Dijo Elinarah con una sonrisa curiosa y al ver la pantalla de su propia posición, murmuró. "Nosotros al parecer no podremos ayudarte."
Sus primeras palabras eran ciertas, al menos a la idea de que la otra parte estaba tratando de mantener la nave de carga sin dañarla.
La posibilidad de que fuera por la tecnología era baja, pero seguramente una vez que lo obtuviera el investigador de la Empresa Cosmos podría hacer algo para atacar a esa voz.
Por supuesto, su tono trataba de buscar que esa voz mostrara sus cartas para atacar a la Cardenal Najjar y si era posible matarla, resultaría bueno para ella.
"Al parecer nos han localizado… Eso es bueno, al menos nosotros no tendremos que ir a ellos." Dijo Elinarah al mirar las pantallas.
Dos hombres y una mujer deseaban infiltrarse en su posición que según esa voz había ocultado 'bien'… Sin embargo, en vez de preocuparse, Elinarah los miró detenidamente y dio una encantadora sonrisa.
Lo suficiente encantadora como para robarle el aliento a cualquiera.
******
Aurora que estaba oculta atrás de unas rocas vio como robots exploradores salían del búnker en donde estaba la señal.
—Lo que fuera que estuviera haciendo la Cardenal Najjar fue lo suficiente aterrador como para llamar la atención. —Murmuró Lennart y dando un gruñido bajo, declaró. —Yo abro camino y ustedes van a la base.
Lennart ya se había transformado a su forma de animal y sus ojos rojos bestiales observaban a ambos.
Era un 'León de las Tinieblas', su pelaje era negro y sus ojos rojos eran el único color que revelaba, pero la sensación que daba era nada más que aterradora.
Incluso para Aurora que se había enfrentado a enemigos fuertes seguía sintiendo un alto de nivel peligro de él y cuando uno pensaba que esa bestia era capaz de atacar mental y espiritualmente, todo tenía sentido.
Tal vez en contra de los robots era inútil, pero no había que subestimar su fuerza.
Tres metros de longitud y dos metros de alto, era pequeño comparado a otras bestias mágicas, pero era veloz y aterrador.
En este momento lo demostró cuando avanzó por la entrada cortando a los robots exploradores.
Como si fuera poco, de su pelaje empezó a salir una niebla negra que se fue extendiendo a gran velocidad impidiendo la vista de los robots.
"Eres el guía." Dijo Aurora mirando a Kairos que tenía una expresión seria.
Ella le había contagiado su seriedad y era normal, ya que esta misión era peligrosa.
Ambos avanzaron, solo que no por la entrada como Lennart, sino que literalmente Kairos la guio a una pared y dos drones que estaban rodeándolo cortaron la pared, creando una entrada.
Entonces quedándose a su espalda, empezó a guiarlo tras entrar al lugar.
El lugar en el que se habían adentrado era un búnker y si bien no se podía ver a lo lejos por la niebla negra, esa niebla le abría un camino por donde pasaban.
Al ser un hechizo controlado por Lennart, ese joven demostró que su capacidad no era una broma y era muy bueno controlando sus hechizos.
Caminando por unos pasillos, luces rojas se encendieron por todas partes y Aurora sintiendo la presencia de adelante, cubrió a Kairos con su cuerpo.
Su espada no era tan útil en un lugar cerrado y estaba en modo de luchadora.
"…"
Un láser salió de la niebla de repente y Aurora se cubrió con sus guanteletes que se había extendido por todo su brazo y luego tras avanzar golpeó al robot, rompiendo gran parte del armazón.
Sosteniéndolo de unos de los tentáculos antes de que cayera, lo lanzó con fuerza hacia la niebla logrando que una explosión sucediera cuando se autodestruyo.
"Quédate a mi espalda en todo momento." Ordenó Aurora mirando a Kairos con solemnidad.
Ese joven solo dio una media sonrisa y asintió como si fuera un niño que estaba siendo castigado.
Se abstuvo de decir algo con respecto a su seguridad y obedeció.
Aurora asintió para sí misma y sintiendo la fuerza de su cuerpo, dio una sonrisa mientras su concepto de luchadora se activaba.
El deseo que estaba empujando sus límites de fuerza era el deseo de proteger a su pretendiente y a diferencia de la ira, ese deseo era intenso.
Demasiado intenso.
"¡Vamos!" Ordenó Aurora de inmediato.
Pisando el suelo empezó a correr hacia adelante por el pasillo y cuando llegó al final, rompió la muralla de metal con su cuerpo antes de avanzar.
*BOOM*
Del otro lado del pasillo se encontraban varios robots exploradores que ella golpeó con sus puños y continúo avanzando.
Podía sentir a Kairos siguiéndola sin retrasarse en ningún momento y también podía sentir quien controlaba los robots se estaba alarmando.
Seguramente no sabía lo que estaban por hacer, pero con la guía de Kairos ellos se estaban dirigiendo al área central del búnker, en donde estaba el sistema de control.
*BOOM*
Rompiendo muro tras muro, Aurora no se detuvo y aplastó todo lo que estaba a su paso.
Su cuerpo recibió los rayos láseres y soportó las balas con su cuerpo y armadura.
Sus reflejos le permitían impedir que ningún disparo pasara a su espalda y cada vez que algún robot trataba de dispararle a Kairos, ella sintió que su cuerpo hervía.
Acercándose a la base de control, Aurora en vez de disminuir su velocidad observó la puerta y cargando con furia, le dio una patada.
La puerta se abrió con todo y en ese punto decenas de rayos láseres le fueron disparados y ella golpeó el suelo con su pie.
*BOOM*
Todo el búnker tembló y la puntería de todos esos drones se desviaron rompiendo las paredes y el techo.
El láser cortaba la pared de metal e incluso algunos lo atravesaban debido a la concentración, pero para Aurora no tuvo importancia, ya que no la tocaron.
Moviéndose a alta velocidad en el mismo momento, aplastó a cada uno de los robots y sus puñetazos o patadas no solo eran aterradoras, sino que destructivos.
Este pasillo era la antesala a donde estaban los paneles de controles, así que la destrucción no necesitaba ser limitado.
Ella no se limitó.
Un solo puño creaba una onda expansiva que destruía a su oponente a la distancia y una de sus solas patadas enviaba a volar a esos robots que tenían tentáculos.
Entonces cuando terminó su espada apareció enfundada en su cintura y su armadura cambio al estilo de espadachín.
"Puedo encargarme desde aquí." Dijo Kairos que estaba flotando desde atrás de ella.
El joven trató de controlar su expresión lo más que pudo, pero Aurora pudo distinguir cierta sonrisa entretenida.
Esa forma de encontrarle diversión a situaciones que normalmente una persona no le encontraría entretenido, era bastante extraña y a la vez tenía un encanto único.
Kairos sin saber que pasaba por su mente activó su armadura de batalla de forma parcial.
Desde su reloj holográfico su brazo fue cubierto por pequeñas placas robóticas y tras caminar por la puerta, los dedos de la armadura se transformaron en tentáculos que fueron al panel de control.
"La autodestrucción ha sido desactivada. Los enemigos encontrados al otro lado han sido inhabilitados." Avisó Minerva con una voz simple.
La entrada al otro lado se abrió y los paneles de control como un centro de mando fueron revelados.
Entre medio en el suelo se encontraban esos robots con tentáculos y Kairos caminó por el lugar, hasta el centro.
En ese lugar, apunto su brazo a los paneles y el brazo se transformó en una masa de tentáculos robóticos… No, no eran tentáculos, eran literalmente cables de conexión que se movieron por sí mismo a las diferentes pantallas.
Conectándose a todo el centro del mando, las luces de los alrededores empezaron a cambiar.
"Malditos bárbaros como se atreven a inte… ¡Ustedes bastardos no saben con quién se están metiendo!"
La voz que había escuchado cuando el grupo se movió, fue escuchada de vuelta y esta vez su tono era enfadado y a la vez alarmado.
Estaba usando habla humana claramente deseando que ellos entendieran su enojo y furia.
Kairos tenía una expresión indiferente y si bien Aurora no sabía lo que estaba haciendo, su atención no se concentró en la expresión del joven y le prestó atención a la entrada.
—Lo que sea que estén haciendo, están enojando demasiado al dueño del lugar. —Avisó Lennart con seriedad y con un tono algo alarmado, declaró. —Algunos robots ocultos en los alrededores se han adentrado a mi dominio de tinieblas.
Esa niebla oscura que había llegado al límite de la sala de mando era el 'dominio' del que hablaba y era normal que pudiera sentir quienes entraban o estaban dentro.
Era normal que la otra parte estuviera enfurecida, ya que no solo detuvieron la autodestrucción de la nave, sino que Kairos estaba priorizando conectarse a la red del enemigo y dejar el virus.
Sintiendo la presencia de varios robots al otro lado, Aurora rompió un tubo de metal y cuando un robot estaba apareciendo por el pasillo lo lanzó como una jabalina.
Lo reforzó con su energía mágica como si se tratara de una espada, lo que hizo que la fuerza y la dureza del metal reforzado fuera suficiente para atravesar la barrera y el armazón.
"¿Cómo va?" Preguntó Aurora al ver que Kairos fruncía el ceño.
"Bien, al parecer Lucius no ha podido resistirse y ha decidido jugar." Murmuró Kairos en respuesta y tosiendo un poco, los cables retrocedieron y declaró. "Ya estamos conectados a la red de nuestro oponente, lo malo es que ahora vendrá por nosotros. Al menos hasta que la primera batalla virtual termine, la otra parte sabrá mi localización."
Aurora no entendió la primera parte, pero sus segundas palabras fueron fáciles de entender.
—No hay problema. Podremos movernos y distraerlo durante un tiempo. De paso, evitamos que el otro equipo se enfrente a más oponentes. —Respondió Aurora a través del vínculo telepático.
Minerva estaba en el reloj holográfico de Kairos y eso significaba que la señal de esa IA iba a ser rastreada hasta él.
Dándole una señal para que se movieran, Aurora esta vez utilizó su espada y se dirigieron por el mismo lugar en el que habían entrado
—Los robots lo están esperando afuera. Algunos que habían ido a la Cardenal Najjar, están volviendo… No creo que pueda distraerlo demasiado. —Informó Lennart con un tono alarmado.
Si bien era fuerte dentro de su dominio que lo ocultaba y afectaba las señales, en espacio abierto era un objetivo fácil.
Después de todo, su forma de bestia estaba centrada en afectar espiritual o mentalmente a sus oponentes.
—No te preocupes, retiraré. Nosotros solo viajaremos por los alrededores hasta que logremos nuestro objetivo. —Respondió Aurora con calma.
Ningún robot se estaba interponiendo por su caminó y ella con su espada en su mano, tomó la delantera para proteger a Kairos.
Con sus sentidos podía darse cuenta de que afuera de la entrada principal lo estaban esperando, pero en vez de preocuparse, solo hizo que su espada tragara todas sus emociones.
El aura intangible e incolora que daba la sensación de poder cortar todo a su paso, rodeó su espada con fuerza y ella respiró hondo.
Su cuerpo estaba rebosando en una gran cantidad de fuerza, dando la sensación de que podía destruir todo a su paso y fue gracias a su concepto de luchadora que había llevado a su cuerpo al rango S.
Viendo la entrada cerca, Aurora le hizo una señal a Kairos para que se detuviera y luego avanzó con calma a la salida.
La luz del sol vino de repente y al mismo tiempo también se pudo ver a los robots láseres que apuntaban al unísono.
Antes de que ellos dispararan sus potentes láseres, Aurora agitó su espada realizando un corte y a una velocidad abrumadora, volvió a cortar forzándose otra vez.
Dos cortes al mismo tiempo con su aura, algo que le hubiera sido difícil realizar antes de ser luchadora, ahora fue posible.
Su visión tenía dos cortes y en ellos todos los robots láseres que estaban en fila, estaban inclinados al igual que los robots que flotaban apuntando con sus tentáculos.
*BOOM*
Las explosiones sucedieron al mismo tiempo y fue tan grande que los robots que antes no fueron cortados, fueron destruidos por el daño explosivo.
"Impresionante." Murmuró Kairos con una mirada fascinada.
Aurora pudo sentir que lo 'fascinado' de su mirada no era por su fuerza, sino que literalmente por ella.
"Verte tan brillante, me hace querer demostrar de lo que soy capaz." Declaró Kairos con una expresión seria.
De su anillo espacial salieron varios drones esféricos y tales drones se transformaron en cubitos que se reunieron en un mismo lugar y conformaron un gran dron que parecía una bola de disco.
Ese nuevo dron voló al cielo y cuando estuvo lo suficiente alto empezó a girar y disparar rayos láseres de todos colores a enemigos que estaban lejos o que se acercaban.
Sin quedarse quieto, Kairos lanzó un cubo metálico al suelo y tras que creciera, se desplegó una moto flotante.
"Es más rápido y seguro que volar." Dijo Kairos invitándola a subir y con una sonrisa, declaró. "También es la mejor opción para huir y para que descanses."
La moto flotante era grande y por su diseño futurística estaba claro que tenía bastante 'capacidades' de defensa.
No se iban a teletransportar, ya que la idea era distraer a su oponente para que lo persiguiera y no pusiera tanto esfuerzo en los otros, pero al mismo tiempo volar era complicado.
Serian atacados con mayor facilidad en el aire y ella tendría que proteger a ambos.
Este medio, aunque parecía más simple, solucionaba el problema del viaje y a la vez era llamativo para atraer a su enemigo.
Por supuesto, entendía que Kairos estaba aprovechando la oportunidad para llevarla a andar y ella tuvo que admitir que era audaz.
"Mantengámonos concentrados. Los otros pueden estar en peligro." Declaró Aurora con seriedad.
Este momento no era para dejarse llevar o coquetear y ella como alguien que daba las órdenes, tenía que mantener la seriedad de la misión.
No le gustaría que luego pasara algo y fuera su culpa por no estar concentrada en el trabajo a causar de haber coqueteado.
"Entiendo…" Murmuró Kairos dándose cuenta de su error.
Antes de que pudiera bajarse, Aurora guardó su espada en su anillo espacial y se subió atrás del sosteniendo de su cintura.
"Está bien con que lo entiendas." Murmuró Aurora afirmándose de la cintura.
¿Por qué daba una advertencia y luego hacia lo contrario?
Aurora se dijo a sí misma que con la advertencia era suficiente y que la idea de viaje de Kairos, también era correcta.
¿En cuanto a porque sus mejillas estaban rojas?
Tal pregunta fue evitada.
Kairos empezó a conducir y la moto empezó a flotar con equilibrio antes de moverse a gran velocidad por el aire… No solo flotaba, prácticamente volaba a baja distancia y Aurora al sentir la velocidad, se afirmó con fuerza.
Si algo había sentido era que Kairos al igual que Alice tenían esa capacidad de encontrar entretenido algunos temas que para otros podría ser muy preocupante o tensos.
No sabía si era confianza, capacidad o algo más, pero Aurora tampoco podía negar que ella se dejaba llevar fácilmente por esa clase de actitud.
Revisando su reloj holográfico para verificar si todo estaba bien, ella sintió el suave viento en sus mejillas y tras mirar hacia atrás, pudo ver que los robots exploradores lo trataban de perseguir.
La llanura que no tenía naturaleza o que estaba poco densa, fue iluminada por el gran sol y Aurora sintió que, si esto no fuera una misión, sería divertido.
Sin embargo, la parte más profesional de ella, le dejo en claro que esto no era una cita o un momento de diversión y su concentración se mantuvo para evitar cualquier percance.
No quería cometer errores porque sus emociones se interpusieron en su camino y eso era lo mismo, aunque su emoción fuera 'cariño romántico'.
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