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8.16% The Guardian [Spanish/Español] / Chapter 80: La máquina perfecta.

Kapitel 80: La máquina perfecta.

En medio de una caravana en movimiento, un camión se apartó de la fila.

"Su turno. Bajen y actúen rápido antes de subir de vuelta." La orden de Liam llegó al grupo de Érica y Nicole.

El camión se movió a un lado dejando la fila de la caravana que viajaba con lentitud y cuando estacionaron Érica y Nicole saltaron de su camión.

Otro camión que llevaba a un paladín y un sacerdote también se estacionó a su lado bajando con ellas.

"Un grupo de cinco monstruos de especie lagarto, un Rango B y los demás son Rango C." Informó Érica leyendo las descripciones de su reloj holográfico.

A su espalda los camiones siguieron pasando, pero el grupo empezó a moverse.

Nicole y el paladín que estaba completamente equipado con una armadura metálica se empezaron a mover tomando la delantera.

Érica y el sacerdote también siguieron a los dos combatientes cuerpo a cuerpo.

"¡Vengan por mí!" Gritó el paladín emanando su fervor de batalla que inmediatamente atrajo a los monstruos.

Como criaturas sin inteligencia que actuaban para eliminar a sus enemigos, una provocación como la del paladín fue el señuelo perfecto para los monstruos que se acercaban.

"¡GRahhh!"

Los lagartos de Rango C eran del tamaño de un gran perro y si bien únicamente el lagarto de Rango B era de un mayor tamaño, ninguno de ellos había mutado por el 'Caos'.

"[Púas de hielo]" Canto Érica y con su varita levantó a una gran velocidad una pared de púas delante del paladín y Nicole.

Su movimiento fue preciso y en el momento indicado, lo que hizo imposible que los lagartos pudieran evitarlo logrando que algunos se empalaran.

El único que no recibió heridas graves fue el lagarto de Rango B, quien con sus garras arañó el escudo del paladín que resistió valientemente.

Permitiendo que Nicole le diera un puñetazo a la cabeza del lagarto, esparciendo relámpagos desde su puño.

Mientras el paladín se dirigía a terminar con los otros lagartos, Érica que ya había preparado su segundo hechizo lo lanzó.

"Grrh…"

Una lanza de hielo atravesó el estómago del lagarto que estaba paralizado y en respuesta el monstruo soltó un gruñido antes de caer al suelo.

Nicole siguió al paladín que había acabado con dos lagartos y mientras generaba plataformas en el aire para superar las púas de hielo, cayó en picada a la espalda de un lagarto que murió por el impacto.

Luego con una media vuelta pateó a otro lagarto que la estaba por atacar y su patada estuvo tan bien dirigida, que envió a la criatura a los pies del paladín, quien a su vez lo eliminó con su espada.

Si bien su patada fue precisa, Nicole se dio cuenta de que ese estilo no se ajustaba a ella.

A diferencia de Aurora que podía dar vueltas por todas partes dando patadas mientras realizaba piruetas, Nicole era alguien que luchaba con sus puños.

Aunque esforzarse en aprender otro estilo de lucha siempre era bueno.

"Volvamos. La cola de la caravana está por pasar." Dijo Érica y el grupo rápidamente volvió a su camión.

El sacerdote que tenía una sonrisa suave en su rostro por no poder haber aportado en la batalla utilizó un artefacto con el hechizo 'limpieza' en todo el grupo.

Luego entraron en sus camiones mientras la caravana seguía pasando.

"Bienvenida." Dijo un joven miliciano que estaba ligeramente tenso.

"Ya terminamos con los enemigos. No hay de qué preocuparse." Comentó Nicole con una sonrisa mientras se sentaban cerca de la parte trasera del camión.

Los refugiados lo miraron agradecidos y cuando llegó la cola de la caravana en donde se encontraba el vehículo de ingenieros que le dejo un espacio, los dos camiones se volvieron a unir a la caravana.

Su actuación fue bastante rápida lo que hizo posible que esta táctica funcionara.

Como la caravana era una larga línea de camiones en donde en la primera y última fila se encontraban los vehículos de ingenieros, tenían algunos minutos para terminar su trabajo y unirse a la caravana.

Agregando que viajaban lento debido a que el camino no había sido transitado durante bastante tiempo y el vehículo de ingeniero lo tenía que arreglar, les daba suficiente tiempo para terminar con su trabajo.

[5:12 p.m.].

Érica reviso la hora en su reloj holográfico y suspiro.

Habían partido cerca de la una del mediodía, pero todavía faltaba cerca de una hora para llegar a 'Jinja'.

Lo bueno era que tendrían tiempo suficiente para atraer a la horda y prepararse para la batalla, lo malo era que si la batalla terminaba tarde tendrían que descansar antes de ir a su siguiente destino.

Ella no podía negar que pensar en los detalles la puso un poco nerviosa.

Si bien no había tomado demasiadas misiones, Nicole estaba segura de que esta misión marcaría una línea definitoria en su vida.

Viajar por el bosque mágico eliminado criaturas mientras sus alrededores estaban rodeados por un mar de árboles de color verdes, sin duda era estresante y un poco aterrador.

"La próxima vez que los detengamos será en una hora cuando lleguemos a 'Jinja', les pedimos que aguanten." Informó Andrés por el canal de comunicación instalado en el camión para que los refugiados escucharan.

Se habían detenido hace una hora para que aquellos que quisieran, hicieran sus necesidades.

En la caravana viajaban niños y ancianos, así que se buscaba que el viaje no resultara demasiado pesado y estresante para ellos, aunque tales concesiones retrasaran su viaje.

"Son muy considerados." Comentó el joven miliciano con una sonrisa cálida.

Los refugiados que estaban en el camión, asintieron ante ese comentario.

Érica dio una sonrisa de respuesta.

No podían empujar a los refugiados a un viaje a toda marcha cuando no había preocupación de tiempo y era innecesario.

Era más, hacerlo resultaría en más problemas que beneficios.

"Hasta que nos toque nuestro próximo turno faltara demasiado tiempo." Dijo Nicole mientras cerraban sus ojos para relajarse.

Los que tomaban el trabajo de eliminar criaturas eran los primeros camiones, así que una vez en la última fila solo había que esperar.

Érica también cerró sus ojos.

En unas horas tendrían una gran batalla y había que aprovechar cada momento para descansar y prepararse para el combate.

******

La mirada de Aurora tembló al ver que Alice empezaba a comer algunas papitas mientras un adolescente lo miraba seriamente.

Una persona normal devolvería la mirada y seguramente convidaría de sus papitas, pero Alice era diferente.

Ella ignoró la presencia y observó el exterior, mientras seguía comiendo en su propio mundo.

Lo bueno era que en este camión se encontraban adultos y no niños que podrían representar un problema para su glotona y poco amable amiga.

[6:20 p.m.].

"Ya acamparemos y puedes pedir algo de comer hasta la cena." Dijo el miliciano que estaba presente en el camión y el adolescente se avergonzó al escuchar esas palabras.

Aurora miró a Alice y agitó su cabeza sin decir nada.

Sabía que para Alice sus papitas eran 'sagradas' lo que significaba que no le convidaba a cualquiera y hacerlo tenía un significado especial.

A pesar de que tenía un anillo espacial que se encontraba repleto de bolsas de papitas de toda clase, no le convidaba a nadie.

"Jefa, un grupo de lycaons se encuentran en las ruinas de 'Jinja'." Informó Liam de repente.

Aurora usó las cámaras que proyectó su reloj holográfico y notó algunos lycaons rondando por las ruinas de la ciudad en donde instalarían el campamento.

La proyección de los drones fue bastante útil.

"Nos adelantaremos con teletransporte." Ordenó Aurora por el canal de comunicación y de inmediato utilizó su brazalete para moverse, llegando al cielo de la ciudad.

Las ciudades en ruinas por lo general no estaban cubiertas por árboles como todo el bosque lo que era agradable, ya que permitía un mejor escenario para la batalla y a la vez hizo posible que acampar fuera más fácil.

A su lado apareció Alice, Akira, la Sumo Sacerdotisa Xaali y el aventurero Vázquez.

"Limpiemos la zona central para la llegada de la caravana." Dijo Aurora y descendió en picada como un meteorito impactando en el centro de donde se reunían las bestias mágicas, provocando una nube de polvo en el proceso.

"Grrr…" Los Lycaons gruñeron salvajemente dudosos ante la repentina enemiga.

A Aurora no le importó que la manada de lycaons hicieran de este lugar su guarida, simplemente hizo que sus puños fueran cubiertos por relámpagos y atacó a los 'perros'.

No usaba demasiada fuerza solo la necesaria para quebrar algunos cuellos y romper algunos huesos.

Al principio los lycaons gruñeron queriendo hacerle frente, pero todo cambio cuando los brazos de Alice cayeran atrapando y golpeando a los lycaons.

Que Akira empezara a congelarlos y que Vázquez empezara a cortarlos no ayudó a la manada y el líder gruñó, tratando de retirarse.

Lamentablemente, al lugar que se dirigieron fue en donde la Sumo Sacerdotisa Xaali se movió y esa sacerdotisa, distorsionó el espacio alrededor de los Lycaons, generando una escena desagradable, de carne, sangre y tripas.

"Pueden venir." Dijo Aurora por el sistema de comunicación y mirando a Vázquez, ordenó. "Encárgate con los aventureros de instalar el campamento para esta noche. Ustedes tienen más experiencia en este asunto. Los milicianos te ayudarán."

La mayor parte de los aventureros tenían una alta experiencia a la hora de sobrevivir en áreas peligrosas como estas.

Instalar el campamento y desplegar la seguridad en los lugares indicados maximizando la eficacia, era algo fácil para ellos.

"Sumo Sacerdotisa Xaali le pediré que se encargue de limpiar los alrededores con sus paladines. En cuanto a los demás necesitamos prepararnos para la llegada de la horda." Agregó Aurora por el sistema de comunicación y luego se empezó a dirigir al puente con Alice.

Cuando llegaron al río 'Victoria Nile' se encontraron con un puente de piedra, conectando ambos lados del río.

Aunque parecía ser creados por humanos, para permitir conectar ambos lados, no fue creado con tecnología, sino que con magia de tierra.

Bastante básico, resistente y lo suficiente útil como para que cumpliera su función de conectar ambos lados.

Y más cuando uno miraba el caudaloso rio, golpeando tanto el puente como la orilla, dando la impresión de que podría arrastrar hasta a un excelente nadador.

"¿Crees que alguna criatura pueda pasar a través del río?" Preguntó Aurora a su amiga.

Si le dijeran a ella que tendría que pasar nadando, dudaría y creería que sería una odisea.

No solo se trataba de las aguas caudalosas, sino que de la profundidad del río y la fuerza del agua, que parecían arrastrar todo a su paso.

Los cambios climáticos causados por la energía mágica fueron sin duda demasiados llamativos y era normal que este pequeño río se volviera tan agitado.

Al sur de la ciudad a lo lejos este río desembocaría en el 'Lago Victoria', que podía ser visto desde aquí.

"Únicamente criaturas superiores a Rango B. Las aguas se ven demasiado agitadas para que las criaturas más débiles lo intenten pasar. Aunque, aquellas criaturas con afinidad al atributo agua o que tengan capacidades anfibias, lo podrán hacer." Comentó Alice y comiendo sus papitas, observó el otro lado del puente.

El otro lado estaba la carretera descubierta y a cada lado estaba lleno de árboles verdes.

Si bien estos árboles no eran tan altos como los árboles en la tribu de gorilas, eran más frondosos de lo que esperaban y fue evidente, que complicaría la futura batalla.

"Tendremos que limpiar los árboles y crear un área desierta para que los magos, tiradores y arqueros puedan demostrar sus habilidades con más eficacia." Señaló Alice con un tono serio.

Aurora también analizó su entorno.

Las ramas, las hojas y el follaje complicaría a los tiradores y aunque podrían disparar, la eficacia disminuiría para los ataques simples y los arqueros o maestros de armas tendrían que utilizar habilidades de disparo más avanzadas, si deseaban dar a su objetivo en este lugar.

"Un equipo que los atraiga, un equipo de emboscada, y un equipo de asalto defensivo." Murmuró Aurora planeando en su mente la mejor forma de utilizar a cada miembro de la caravana.

En la horda se encontraban más de mil criaturas.

Era muy probable que en el grupo no se encontrara un Rango S, debido a que esa clase de criatura, aunque tuviera una menor inteligencia no sería fácilmente intimidada por una bestia mágica de Rango SS.

Esta horda se formó debido a una criatura de rango superior presionaba a otras criaturas únicamente con su presencia lo que hizo que intimidara a las criaturas débiles y huyeran en una misma dirección en grupos que los hizo sentir a salvo.

La mayor parte de la horda eran criaturas o bestias mágicas que no eran tan inteligentes y se guiaban por sus instintos, sintiendo seguridad en los números y conformando la horda.

"Atrapar su atención será el problema. ¿Usaremos un cebo mágico?" Preguntó Alice con curiosidad.

Algunas ciudades y pueblos tenían artefactos que alejaban a las criaturas y bestias mágicas normales sin una alta inteligencia.

De la misma forma había artefactos que podrían atraer la atención de esas criaturas sin alta inteligencia.

Llevaría a una batalla más complicada en un área determinada, pero si se usara bien podría convertirse en un cebo para crear una trampa perfecta.

La caravana tenía un par de esos artefactos en caso de necesidad.

"Sí, necesitamos movernos rápido. La horda llegará en dos horas como máximo." Comentó Aurora mientras caminaba en dirección al otro lado del puente.

Los brazos a la espalda de Alice, se empezaron a convertir en cuchillas negras mientras caminaba por el puente.

Podían utilizar los vehículos de ingenieros para que movieran los árboles caídos, pero nadie era mejor para realizar el trabajo de cortar que Alice.

"Vamos te toca trabajar." Dijo Aurora golpeando el hombro de su amiga y con una sonrisa, declaró. "Yo hago la cena hoy."

Los ojos de Alice brillaron animada por la propuesta y ella se adelantó, usando cuatro brazos para moverse mientras que otro brazo en forma de cuchilla cortaba un árbol desde la base.

Estaba empleando diez brazos y aunque cuatro se utilizaban para moverse, los otros seis se convirtieron en espadas afiladas que cortaban árboles y las ramas, dejando únicamente los troncos.

Alice se movió con una velocidad, precisión y eficacia que sorprendería a cualquier espectador.

Ella era la máquina perfecta para la desforestación.

Por su parte Aurora empezó a organizar los preparativos para la defensa de la horda a la vez que se encargaba de que nadie se excediera en el esfuerzo, tratando de evitar que la fuerza de batalla disminuyera antes de que la horda llegara.

No era un trabajo tan difícil, ya que los vehículos de ingenieros podrían encargarse de mover los árboles y reducir la fuerza de trabajo a la vez que podrían preparar algunas defensas con magia de tierra o el artefacto psiónico.

Mirando los recursos que estaban registrados en su reloj holográfico, Aurora empezó a seleccionar lo que sería útil para desplegarlo ahora.

Minas, artefactos mágicos ofensivos, pergaminos de hechizos y diferentes objetos útiles en caso de emergencia.

Este no era el primer trabajo de Aurora, tampoco era su primer enfrentamiento a una gran horda.

Estar preparada para cualquier situación al azar era prioritario cuando se viajaba al interior del bosque mágico.

Esta situación no era diferente.


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