La pelea entre los dos magos Legendarios estaba al rojo vivo. Las runas mágicas cubrían el espacio y hacían que la cueva brillara tan resplandeciente como el día. Los elementos mágicos hervían por todas partes, e incluso parecía que el tiempo mismo se partiría por la mitad.
Innumerables hechizos se desataron como olas torrenciales que amenazaban con destruir el mundo, cuando la escarcha y las llamas llenaron la vista. Cayeron trozos de piedra de las paredes que los rodeaban, mientras el suelo temblaba bajo sus pies y cascotes destrozados caían sobre ellos desde el cielo. No importaba dónde miraran, parecía que se acercaba el día del Juicio Final.
La intensidad de esta pelea excedía la imaginación de todos, incluso la de Lin Li...