Kapitel 721: Extra 19: El mundo he de cambiar (2)
Kurama sonrió ligeramente mientras veía como su hija dejaba al chico a un lado y aparecía a su lado - "¿Te divertiste?"
"Es un poco raro" - respondió Izumi con honestidad.
"¡Oye, no soy raro!" - exclamó Inuyasha con furia, tal parecía que esas palabras hicieron que él recuperara el control de sus emociones.
"Claro, niño perro" - respondió Izumi con desdén.
Inuyasha estuvo a punto de explotar, cuando recordó que esta extraña chica estaba junto a un monstruo, así que rápidamente se puso en guardia porque no había forma de que dejara escapar la oportunidad de tomar la perla.
"¿Quién eres?" - preguntó Kaede con aprensión.
"¿Yo? Mi nombre es Kurama Uzumaki" - respondió Kurama mientras acariciaba su mentón - "Patriarca del clan Uzumaki"
"¡Quiero saber la raza!" - exclamó Kaede con miedo y curiosidad.
"Oh, bueno, yo soy un Kitsune" - respondió Kurama mientras veía como su hija liberaba sus orejas y 3 colas de zorro.
Inuyasha miró a Izumi con sorpresa mientras sentía como su corazón latía con fuerza, ella no solo era una Hanyo como él, sino que también su raza era ligeramente similar a la suya.
Bueno, él técnicamente no estaba equivocado porque los perros y zorros eran parte de los cánidos.
"No, no eres un Kitsune... ¡Tú eres un Kyubi!" - exclamó Kaede con seriedad mientras retrocedía ligeramente, porque a pesar de que los Kitsune no eran tan fuertes.
Kurama solo sonrió cuando escuchó esto mientras que Kagome miraba a al apuesto hombre de cabello blanco con sorpresa - "¿Eres un Kyubi?"
"No" - respondió Kurama mientras sacaba sus orejas de zorro junto a 10 colas peludas - "Soy un Jubi"
"¡¿D-D-Diez colas?!" - exclamó Kaede mientras su rostro palidecía.
La expresión de Inuyasha palideció. Como Hanyo, él sabía de algunos monstruos legendarios, y el Kyubi era uno de ellos, pero aquí estaba un Kitsune que había roto el estigma de que 9 era el número máximo de colas posible, lo cual lo hacía mucho más peligroso que un Kyubi normal.
"Ahora bien, según escuché de ustedes, esta cosa es la Perla de Shikon, aunque honestamente más que un artefacto místico capaz de supuestamente tener poder ilimitado, parece un juguete" - dijo Kurama con neutralidad mientras observaba detenidamente la piedra sagrada - "Lo que sí es interesante, es que la creadora siga luchando contra ese demonio"
Los ojos de Kaede se abrieron en sorpresa cuando escuchó esto porque no se esperaba que alguien descubriera el secreto de la perla. Ella solo sabía sobre esto porque su hermana mayor le contó sobre esto porque era posible que ella tomara su lugar en el futuro, aunque luego de que Kikyo decidiera quemarse junto a la perla para prevenir que cayera en las manos equivocada, esta posibilidad desapareció.
"Ok, creo que es suficiente, me gustaría que alguno de ustedes me guiara de regreso a casa porque todo esto es una locura" - dijo Kagome mientras miraba alrededor - "¿Perlas con poderes místicos? ¿Monstruos? ¿Un chico perro lleno de pulgas y ahora zorros humanos? Siento que estoy volviéndome loca si acepto todo esto"
Kurama soltó una pequeña carcajada antes de sacudir la cabeza - "Por tus ropas puedo sentir que no eres de esta época"
"¿Eh? ¿Cómo lo sabes?" - preguntó Kagome con sorpresa.
"Tengo mis métodos" - respondió Kurama mientras se encogía de hombros.
"¿Entonces sabes cómo puedo regresar a casa?" - preguntó Kagome con ligeras esperanzas.
"La forma más rápida sería por el mismo método que usaste para venir a este tiempo, y si mi deducción no me falla, tendrías que usar esto como catalizador para regresar a casa" - respondió Kurama mientras le mostraba la perla.
"Uh..." - Kagome no supo qué decir cuando escuchó esto, así que decidió preguntarle si podría devolverle la perla de forma amable.
"Claro, no necesito esta cosa, además, no puedo dejar que una joven como tú, en un lugar como este" - respondió Kurama mientras aparecía frente a Kagome, quien se sonrojó al ver lo apuesto que era el Kitsune masculino.
"Uh, gracias" - murmuró Kagome con el rostro rojo.
Inuyasha frunció el ceño porque se sentía extraño con la vista de que esta chica que era prácticamente una copia de la mujer que él amó años atrás estuviera sonrojándose con otro hombre, aunque rápidamente sacudió la cabeza para poder alejar estos pensamientos.
"Espera, si ese Kitsune le devuelve la perla, será mucho más fácil poder robarla, o sea, comparar el peligro de una niña inepta como esa copia de Kikyo, es mucho menor que el de un Daiyokai" - pensó Inuyasha con emoción.
"¿Le devolverás la perla, así sin más?" - preguntó Kaede con sorpresa porque no se esperaba que un Yokai fuera tan indiferente con un artefacto de tan alto poder.
"Claro, esta cosa no tiene ningún tipo de utilidad para mí" - respondió Kurama mientras se encogía de hombros - "Aunque tengo que advertirte de algo"
"¿Eh? Oh, por favor dime" - dijo Kagome con una pequeña sonrisa agradecida.
"Te recomiendo que tengas cuidado en tu era, y que empieces a entrenar porque por lo que puedo ver, esta cosa atrae a los de mi especie" - respondió Kurama mientras apuntaba al chico perro, quien rápidamente desvió la mirada porque no quería ganarse la atención del Kitsune de diez colas.
"¿Entrenar?" - repitió Kagome mientras fruncía el ceño - "¿Por qué?"
"Porque en el momento que regreses a tu era usando la perla, dejarás abierto el portal" - respondió Kurama mientras se encogía de hombros - "Así es como funciona este tipo de situaciones"
Kagome palideció cuando escuchó esto mientras miraba a Kaede, quien negó con la cabeza porque ella no estaba segura de que Kurama estuviera diciendo la verdad"
"Tousan no está mintiendo, él es un experto en el viaje dimensional, y movimientos espacio-tiempo" - respondió Izumi mientras fruncía el ceño al mostrar el escepticismo en los rostros de las dos mujeres.
"¡¿Tousan?!" - exclamaron Kagome, Kaede e Inuyasha con sorpresa al ver a la chica.
"¿Él es tu padre?" - preguntó Kagome para asegurarse.
"Sí, su cuerpo cambió ligeramente cuando llegamos a este lugar, es por eso que se ve tan joven" - respondió Izumi mientras ladeaba la cabeza.
"Espera... ¿Te apareaste con una humana?" - dijo Inuyasha mientras ignoraba las miradas molestas de las mujeres porque sinceramente no les importaba en lo más mínimo. Él solo quería saber el motivo por el cual el Kitsune de diez colas lo había hecho.
"Por supuesto, ella es una de las personas más importantes de mi vida, después de todo, es la madre de mi princesa" - sonrió Kurama mientras veía como Izumi ladeaba la cabeza para que nadie viera su rostro rojo.
Inuyasha se quedó en silencio porque no entendía por qué su situación era tan diferente.
Izumi parecía feliz y su padre la apoyaba, mientras que a su madre y a él los trataron como basura durante toda su infancia - ". . ."
"¿Estás bien?" - preguntó Izumi mientras aparecía frente a Inuyasha.
"No es justo..." - murmuró Inuyasha mientras apretaba los dientes - "¡No es justo! ¡¿Por qué nuestras situaciones son tan diferentes si tenemos el mismo origen?!"
Kurama se quedó en silencio mientras que Kaede fruncía el ceño. Ella había escuchado un poco sobre Inuyasha por parte de Kikyo, aunque no era mucho porque su hermana mayor respetaba la privacidad de su enamorado, aunque ahora veía que el Hanyo no era tan malvado como había escuchado luego de la batalla que él tuvo con su hermana.
"No lo sé, pero las cosas pueden mejorar, solo tienes que mirar alrededor y buscar por alguien que te entienda y te extienda su mano" - respondió Izumi mientras le daba su mano.
Inuyasha se quedó en silencio mientras apretaba los dientes antes rugir con furia - "¡No quiero su compasión, solo deseo la perla para convertirme en un verdadero Yokai! ¡Quiero dejar esta debilidad que es mi parte humana, quiero destruirla para dejar de sufrir, quiero ser parte de algo, no un simple paria para mis dos herencias!"
"¿Los híbridos son discriminados?" - preguntó Kurama con ligera furia porque la gran mayoría de sus hijos eran híbridos.
"Es horrible..." - dijo Izumi mientras miraba al chico perro con pesar.
"¡No me mires así, no quiero tu compasión!" - rugió Inuyasha mientras sentía como su furia crecía drásticamente.
"Lo Hanyo no son ni humanos, ni Yokai, es por eso que son discriminados por sus dos herencias" - respondió Kaede con honestidad, preocupándose porque podía sentir el creciente odio que Kurama estaba liberando, no hacia ella, sino a la sociedad actual.
"Te equivocas, los Hanyo son mucho más de lo que ustedes piensan, ellos tienen las fortalezas de las dos razas, eso los hace superiores" - respondió Kurama con neutralidad mientras miraba al chico perro - "Ellos tienen los poderes de su progenitor Yokai, y tienen la consciencia, corazón y habilidad de adaptarse de su progenitor humano"
Inuyasha levantó la mirada y observó a Kurama con sorpresa porque era el primer Yokai que apoyaba a su especie.
"Ya decidí que es lo que voy a hacer" - dijo Kurama mientras miraba a su hija - "Hasta que podamos regresar a casa, voy a crear un lugar para los de tu especie"
"Estás loco..." - dijo Inuyasha mientras le daba una mirada a Kagome antes de retirarse en silencio. Él no tenía las ganas de intentar tomar la perla luego de mostrar una apariencia tan denigrante para alguien de su especie.
"Tousan..." - dijo Izumi mientras miraba a su padre.
"Ve, estoy seguro de que él hablará contigo" - respondió Kurama con una sonrisa, después de todo, solo alguien en su mismo lugar puede entender lo que pasa por su cabeza.
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[Origen] Cap 683 <--- Disponible en Pa treon.
[La Leyenda del Kyubi: Vol 4] Extra 19(17) <--- Disponible en Pa treon.