". . ." - Kurenai se quedó en silencio mientras veía las expresiones tristes de las chicas. Ella se sentía mal porque sabía de los sentimientos que ellas tenían por el Genin de cabello rojo.
"Ino-chan... Hinata-chan..." - murmuró el pelirrojo con sorpresa porque no había sentido la presencia de las chicas porque tenía toda su atención en Kurenai.
"No digan nada más" - negó Ino mientras suspiraba con pesar - "De alguna forma lo vi venir"
". . ." - Hinata solo miró con tristeza al chico pero no dijo nada.
"Lo siento chicas" - suspiró la kunoichi de ojos rojos - "Nunca pensé que algo como esto sucedería..."
Kurenai estaba siendo sincera porque nunca se le pasó por la mente que empezaría a sentir algo por un chico menor que ella, menos su propio Genin pero ella no podía hacer nada para retener sus crecientes sentimientos. Kurenai necesitaba el apoyo de alguien y ella lo había encontrado en la presencia del pelirrojo.
"No la culpamos, Kurenai sensei..." - suspiró Ino con pesar - "Después de todo, uno no puede controlar los sentimientos que empieza a desarrollar..."
La Genin de cabello rubio había detectado los cambios en la mirada que Kurenai le daba al chico que le gustaba pero lo había ignorado porque su sensei estaba en una relación con Asuma Sarutobi.
"Kurenai sensei... ¿qué pasó con Asuma sensei?" - preguntó Hinata, quien no comprendía como su amable sensei engañaría a su novio.
". . ." - Kurenai se quedó en silencio unos segundos mientras pensaba sin decirles o no sobre su situación, claro que omitiendo lo sucedido con Hiruzen.
"Creo que sería buena idea que les contaras" - dijo Kurama con una sonrisa - "Ellas han estado preocupadas por ti más de lo que crees"
". . ." - Kurenai mantuvo su silencio pero luego de unos segundos asintió. Ella les contó sobre algunos detalles y las chicas no podían creerlo, ahora comprendían el motivo del que Kurenai estaba tan triste estos últimos días.
"Se como se sienten con lo que vieron y nuevamente les digo que lo siento" - suspiró la kunoichi de ojos rojos con pesar.
"No tiene que disculparse, Kurenai sensei" - negó Hinata con una ligera expresión de dolor - "Felicidades por iniciar una relación con Kurama-kun"
"No estamos en una relación" - negó Kurenai mientras se sonrojaba ligeramente.
"¿No?" - dijo Ino con sorpresa - "¿Y el beso?"
"S-Solo estaba comprobando algo..." - murmuró Kurenai mientras movía su mirada hacia otra dirección.
". . ." - las chicas quedaron en silencio cuando escucharon el motivo.
Kurama había mantenido su silencio por casi toda la conversación porque encontraba que era mejor que ellas hablaran, incluso la idea de retirarse para que tuvieran más privacidad pasó por su mente pero luego de pensarlo por un poco más, él decidió no hacerlo porque sentía que afectaría de forma negativa a la kunoichi de ojos rojos.
* * * * * * *
Las chicas continuaron conversando entre ellas mientras Kurama estaba estirado en el suelo mientras miraba el cielo. Él se sorprendió por el cambio tan repentino de la conversación.
"¿Acaso no recuerdan que Kurama-kun está en el CRA?" - preguntó Kurenai con sorpresa al ver lo deprimida que estaban sus estudiantes luego de ver su beso con Kurama.
". . ." - las chicas solo se palmearon el rostro mientras se sentían estúpidas por no recordar ese detalle tan importante.
"Lo tomaré como un no" - negó Kurenai.
"Ugh" - las chics solo se quejaron con molestia pero aún así solo suspiraron con pesar.
"Dejando eso claro, me gustaría que me permitieran pasar el día con Kurama-kun para poder seguir probando este sentimiento que tengo" - dijo Kurenai con seriedad - "Solo por hoy..."
". . ." - las chicas se quedaron en silencio pero aún así asintieron. Ellas no podían meterse en la vida de las demás, menos de alguien importante para ellas. Puede que ellas sufrieran si vieran al chico con otra chica pero sabiendo que él podía tener más de una pareja, solo significaba que tenían que esforzarse más por estar a su lado.
"Gracias chicas" - sonrió Kurenai mientras le daba una abrazo a sus Genins cuando vio que ellas asintieron.
"Supongo que nos vemos mañana" - dijo Ino mientras le daba una mirada a su amiga - "Vamos, Hinata-chan"
"Ok" - asintió Hinata mientras le daba una mirada a su maestra - "Buena suerte"
"Gracias" - asintió Kurenai mientras veía como las chicas se retiraban - "Se que escuchaste todo... eso no está bien..."
"No es mi culpa que mis sentidos sean mejores que los de un humano normal" - respondió el pelirrojo.
"Como sea, al menos ya no tengo que preguntarte si quieres salir conmigo o no" - suspiró Kurenai mientras le daba una mirada expectante al chico.
"No tengo problema" - asintió el pelirrojo.
"Vamos" - sonrió Kurenai mientras tomaba la mano del chico.
". . ." - Kurama se quedó en silencio mientras era guiado por la kunoichi
* * * * *
La pareja continuó con su cita improvisada y Kurenai tenía que admitir que había sido el momento más feliz que había tenido en años. Kurama era tal como pensaba, amable y considerado con sus necesidades, sin contar que no era un bastardo obsesivo que la ahogaba constantemente con sus problemas.
En estos momentos los dos estaban caminando hacia la casa de Kurenai porque la cita había terminado.
Kurenai estaba un poco molesta por esto pero no podía hacer nada para impedirlo porque Kurama tenía algo que hacer.
"Muchas gracias por haber aceptado mi petición" - dijo la kunoichi de ojos rojos con una sonrisa.
"No tienes que hacerlo" - negó el pelirrojo - "Yo también me divertí"
"¿Podemos repetirlo alguna otra vez?" - preguntó Kurenai con emoción.
"Solo tienes que pedirlo y lo haré" - sonrió el Uzumaki.
Kurenai no pudo contenerse más así que tomó al chico y le dio un beso. Luego de unos segundos comprendió sus acciones y se sonrojó como nunca - "Lo siento..."
". . ." - Kurama se quedó en silencio mientras le daba una mirada a la mujer. Él no sabía que realmente que hacer con Kurenai ya que al igual que ella, él nunca pensó que habría algo entre ellos.
"¿Kurama-kun?" - preguntó Kurenai con un ligero miedo. Ella sentía que se había propasado demasiado ya que el chico no estaba respondiéndole.
"No es nada... solo estaba pensando" - respondió el pelirrojo con una sonrisa - "Lamento no poder quedarme más tiempo"
"No te preocupes" - asintió Kurenai - "Nuevamente, te pido disculpas por mis acciones"
"No es necesario" - negó el pelirrojo mientras le daba una última mirada a la mujer - "Nos vemos mañana..."
". . ." - Kurenai se quedó en silencio mientras veía como el pelirrojo se retiraba. Ella no sabía que hacer ahora ya que era primera vez en su vida que realmente empezaba a interesarle alguien - "Mejor me doy una ducha para poder despejar un poco la mente... tal vez así pueda encontrar una solución..."
* * * * * *
El tiempo continuó trascurriendo y ya era de noche.
Kurenai en estos momentos estaba preparándose para poder ir a dormir. Ella todavía tenía una sonrisa en su rostro por los sucesos que habían pasado durante el día - "No creo que el día podría ser mejor..."
"Ahí es donde te equivocas Kurenai... porque está a punto de mejorar..." - dijo una voz detrás de ella.
"¡Asuma!" - exclamó Kurenai mientras miraba a su invasor - "¡¿Qué haces aquí?!"
"Vengo por lo que es mio..." - respondió el Jonin masculino con una mirada lujuriosa - "Y voy a disfrutarlo"
"!" - Kurenai se sorprendió pero rápidamente se puso en guardia.
"¡No te resistas, Kurenai" - dijo Asuma con emoción - "¡Solo retrasas lo inevitable!"
". . ." - Kurenai solo guardó silencio mientras seguía mirando a su contrincante con frialdad.
"Supongo que será de la manera difícil" - murmuró Asuma mientras se lanzaba contra Kurenai.
Kurenai rápidamente intentó usar su Genjutsu para poder salir de esta situación pero extrañamente no podía concentrar bien su chakra - "¡¿Qué está pasando?!"
"Veo que te diste cuenta" - sonrió el Jonin fumador - "No puedes moldear bien tu chakra porque usé una mezcla que usa el IT para poder retener con mayor facilidad a sus prisioneros"
"!" - Kurenai solo se sorprendió pero esos momentos de sorpresa fueron suficiente para Asuma, quien sin mucho esfuerzo logró capturar a la mujer - "¡¿Qué intentas hacer?!"
"Lo que debí haber hecho desde el principio..." - dijo Asuma mientras la amordazaba.
"¡HMPH!" - Kurenai solo podía mirar con furia al hombre mientras hacía todo lo posible por intentar safarse pero su expresión cambió cuando vio como su ex-novio estaba empezando a quitarse los pantalones. Ella solo podía mirarlo con miedo mientras le rogaba con la mirada que no continuara pero nada parecía afectar a su captor.
"Voy a disfrutar esto..." - dijo Asuma mientras le daba una última mirada a la mujer pero se congeló cuando escuchó una segunda voz - "Pero no tanto como yo..."
"!" - él rápidamente intentó moverse pero no pudo porque su enemigo era mucho más rápido - "¡Ack!"
"Te lo advertí pero parece que no me tomaste enserio" - dijo el recién llegado Kurama.
"!" - Kurenai solo le dio una mirada llena de felicidad y si pudiera hacerlo, ella le daría una abrazo.
"Tranquila Kurenai-san... todo está bien..." - dijo Kurama con una sonrisa.
Lágrimas empezaron a correr por las mejillas de la kunoichi quien solo pudo asentir.
"Ahora... ¿qué tal si jugamos un poco... Asuma-chan?" - continuó el pelirrojo mientras le daba una sonrisa sádica al Jonin - "Aunque mejor espero un poco... estoy seguro de que mi compañera disfrutará hacerte sufrir"
". . ." - Asuma solo lo miró en silencio mientras sentía como perdía la consciencia.
* * * * *
Luego de revisar el estado de Asuma, Kurama tomó a Kurenai y la llevó a la casa Uzumaki. Él le explicó la situación a Kushina, quien tenía una mirada llena de instinto asesino. Le tomó 5 minutos el calmarla y poder salir de la casa, solo para encontrarse con su compañera.
"¡Por fin llegas!" - dijo Anko con una sonrisa. Ella había vuelto esta misma tarde de su misión - "Sinceramente nunca pensé que todo esto escalara tan rápido..."
"Tampoco yo pero no hay nada que podamos hacer" - dijo Kurama con seriedad. Él ya le había dado suficiente respeto a Hiruzen al perdonar a Asuma luego de lo que dijo pero tal parece que no fue suficiente para el Hokage.
"Por cierto, voy a traerlos a 'Ellos' " - dijo Anko con una sonrisa sádica - "Estoy segura de que lo disfrutará"
Kurama le había explicado la situación cuando se encontraron luego de separarse de Kurenai y Anko como cualquier mujer, estaba molesta por la actitud del hijo del Sandaime, así que decidió preparar algunas cosas de ser necesario.
"Ve a buscarlos... hoy será una noche larga" - dijo Kurama con seriedad mientras la bella mujer de cabello morado solo le daba una sonrisa coqueta y caminaba hacia su destino para poder recoger a los "Voluntarios".
* * * * * *
A la mañana siguiente, Hiruzen estaba en su oficina con una mirada preocupada.
Su hijo había escapado de la residencia Sarutobi luego de matar al grupo de Anbus que lo vigilaban. Ellos se habían confiado porque nunca pensaron que el hijo de su líder haría algo tan mal visto como asesinarlos.
"Por favor... por favor no hagas nada estúpido..." - murmuró Hiruzen con dolor mientras esperaba que sus Anbus pudieran encontrar a su hijo a salvo pero parecía no haber resultados. Él estaba rogando por que Kami-sama escuchara sus plegarias pero mientras más pasaba el tiempo, más miedo tenía.
"Hiruzen-sama..." - dijo su secretaria mientras entraba a la oficina - "Kurama-kun quiere hablar con usted"
Cuando escuchó estas palabras, una mal presentimiento se apoderó de su mente - "Dile que pase..."
Kurama lentamente apareció frente a Hiruzen con una mirada neutral - "Sarutobi-san..."
"Kurama Uzumaki..." - murmuró el Sandaime - "¿Qué es lo que necesitas?"
"Vengo a entregar algo..." - dijo Kurama mientras le lanzaba un pergamino de almacenamiento - "Lamento tu pérdida..."
Hiruzen se levantó de golpe y le dio una mirada salvaje al chico pero rápidamente se calmó. Si él peleaba contra Kurama, toda Konoha sufriría por ello, así que no tuvo más remedio que calmar su creciente ira.
"Se como te sientes, Sarutobi-sama" - dijo Kurama con calma.
"¡¿Estás burlándote de mi?!" - exclamó Hiruzen con furia.
"No... no me refiero a eso" - negó el pelirrojo - "Me refiero a la situación donde tus seres queridos son asesinados y no puedes hacer nada para vengarlos..."
". . ." - Hiruzen solo se mordió el labio con furia mientras suspiraba con pesar.
"Pero eso no cambia el hecho de que te advertí de las consecuencias si Asuma atacaba a alguien bajo la protección del clan Uzumaki" - Kurama solo podía darle una mirada triste al hombre, él no quería destruir la poca familia que tenía Hiruzen y Biwako pero tampoco podía permitir que alguien atacara a su familia o amigos.
"Ya dejaste en claro tu punto... ahora te pido que te retires..." - dijo Hiruzen con una voz fría y sin emociones aunque podía notarse lo mucho que estaba conteniendo su dolor y tristeza.
". . ." - Kurama no dijo nada más, solo salió de la oficina.
Cuando vio que Kurama se había retirado, Hiruzen liberó todo lo que tenía dentro. Él sintió como su corazón se partía en miles de pedazos mientras liberaba el sello del pergamino. Frente a él no estaba otro que el cadáver de su hijo menor - "Asuma... por qué... ¿por qué tenías que hacerlo?"
Hiruzen solo quería ir donde Kurama y vengar a su hijo pero sabía que si lo hacía, no solo la aldea sufriría las consecuencias, sino que su imagen quedaría completamente destruida porque el Clan Uzumaki solo tendría que informar sobre la situación.
Como embajadores, los miembros del Clan Uzumaki estaban sujetos a la ley internacional de las Naciones Elementales, así como su protección. Si una Aldea atacaba a un Embajador, no solo causaría una guerra con la Aldea opuesta, sino que podría escalar a una guerra mundial y si bien el Clan Uzumaki estaba casi extinto, ellos todavía tenían conexiones con los Daimyo de diferentes naciones y este era el motivo del por qué las 4 grandes aldeas que participaron en su extinción, no continuaron persiguiendo a los sobrevivientes.
"Asuma..." - murmuró entre llantos el Hokage mientras miraba el cadáver de su hijo - "No sabes como harás sufrir a tu madre..."
* * * * * * *
Capítulo reescrito desde cero