Nian Xiaomu: —¡¡...!!
¡Él siempre la estaba molestando! ¡Era imposible tener una buena conversación con él!
Cuando los ojos de Nian Xiaomu se encontraron con su mirada seria, ella se puso roja de una forma incontrolable y se levantó súbitamente.
—Yo, necesito ir al baño. ¡No me sigas!
Mientras hablaba, ella se dio la vuelta y salió disparada.
Cuando ingresó al baño, ella cerró la puerta del cubículo y se apoyó contra la misma para recuperar el aliento.
Abuela.
Nieta política.
Nian Xiaomu cubrió su rostro con sus dos manos. Ella estaba reprimiéndose de gritar al pensar en las palabras de él.
Ahhhh
¡Muy coqueto!
¿Por qué alguien confesaría su amor de esta manera...?
¡Incluso usó el nombre de su abuela!
Sin embargo, así de irresistible era Yu Yuehan, con su vientre abultado.
Si no hubiese escapado a tiempo, ella podría haber perdido el control y haberlo besado en el acto...