Dentro de la silenciosa habitación de piedra, Linley yacía ahí silenciosamente, con cuatro tipos de esencias elementales arremolinándose adorablemente alrededor de su cuerpo. En la silenciosa habitación de piedra, aparte de Linley, solo Bebe estaba presente. En cuanto a Bluefire, Reisgem y Reihom, ellos no molestaron a Bebe. Sabían muy bien cuán profundo era el afecto entre ellos.
Bebe permaneció en silencio al lado de Linley, su pequeño rostro estaba cubierto de manchas de lágrimas.
—Jefe —forzó una sonrisa—. Dos mil años. En mi corazón, la persona a lo que siempre he admirado eras tú. Cuando éramos jóvenes, siempre dormía o jugaba, pero tú, jefe, siempre trabajaste duro en tu entrenamiento, nunca te relajaste. Sé que parte de eso tenía que ver con tu padre y también con el abuelo Doehring, pero nunca te rendiste, ¿verdad?