Happy sacó a su sanador en la competencia de equipos de las eliminatorias...
Todos en la Alianza sabían lo osado que era Happy y que ocasionalmente harían una apuesta poco convencional. Sin embargo, nadie pensó que se atrevieran a hacerlo en esta partida de vida o muerte de las eliminatorias.
Un equipo completamente ofensivo, apostándolo todo en un lanzamiento de los dados...
Estas dos frases iban de la mano en el juego competitivo. Cuando la formación entraba en juego quería decir que no había vuelta atrás. Un equipo sin sanador solo podía presionar y atacar. No había otra opción.