—¡Sr. Chen, disculpe la espera! —El gerente Loo se apresuró a llegar, pero estaba un poco desconcertado al ver que Chen Xuan había estado sentado en las escaleras todo este tiempo.
—Sr. Chen, es más fresco dentro de la oficina de ventas. ¿Por qué espera aquí afuera con este calor?
—Bueno... —Chen Xuan dudó, preguntándose si explicar o no.
En ese momento, Liu Bo se acercó.
—¿Gerente Loo, el VIP que mencionaba no podría ser él, verdad?
—¿Cuál es el problema?
Liu Bo no pudo evitar sonreír con amargura.
—Gerente Loo, estoy bastante seguro de que debe estar equivocado. A este chico lo conozco; es Chen Xuan, mi compañero de secundaria. Pero su familia es muy pobre. No solo no terminó su título universitario, sino que también debe una cantidad enorme de deudas. ¿Cómo podría ser algún VIP?
—Sí, gerente Loo, él es simplemente un perdedor. ¡Por favor, no se deje engañar por él! —Cao Li intervino desde un lado.