Capítulo 6.
Me quedo sin habla observándolo, no sabía ni por sospecha que él participaba en estas cosas, aunque ni lo conozco. Tiene una cara tan hermosa, esa mirada sin desenfreno, ese aire dominante, la experiencia.
Toma mi mano y me ayuda a ponerme mi ropa de nuevo en silencio. No tengo la menor idea que decir o comentar esto me dejo sin ideas o la verdad no lo sé, bajamos de allí hasta donde está Lauren que me toma de la cintura escabulléndose en mi boca con su lengua. Cuando termina me sonríe y se va, solo estoy perdida, todo le encanto no quejas solo que si.
-Te impresionó tanto.- Menciona Masón.
-No esperaba que fueras tú Masón.- Contestó mirándolo.
-Yo sólo venía de paso, pero sorpresa una hermosa peli negra con cuerpo de diosa gimiendo, eso es inevitable.- Me sonrojo ante su tono de voz.
-Cuando tiempo prácticas esto?.- Le pregunto mientras nos sentamos en los asientos.
-Tal vez unos 6 Años, también me llamo la atención.- Sonríe, mientras se muerde el labio.
Masón en un movimiento me sienta en su regazo, de la impresión suelto un grito, joder que a este paso muero.
-Que crees qué haces masón, déjame bajar.- Me muevo como sanguijuela, pero el idiota le mantiene bien agarrada.
Mete su cabeza en mi cuello.- Aquí soy un dominante, aquí sigues mis reglas, aquí le respetas, no te he azotado por qué me gusta esas garras, pero contrólate Abigail.- termina en un tono amenazante.
-Pero no te conozco Masón, no puedes apropiarte de mi así.- Soy callada por sus labios.
-Si sigues hablando, voy a ser que me folles la polla con tu boca.- Mejor me callo.
Quedamos en silencio el viendo un nuevo show frente a nosotros mientras que yo solo recuesto mi cabeza en su hombro mirando a los demás, es raro, supongo así se sentirá una sumisa y no me desagrada del todo.
Masón en un momento desprevenido otra vez, entra su mano por mi vestido hasta llegar a mi vagina, aparta la braga y mete dos dedos. Gimo es respuesta, mientras este me masturba, muevo un poco mis caderas en respuesta. Cuando estoy por llegar al orgasmo se detiene, me quejo estaba tan bien.
-Para que aprendas, que debes comenzar a tener disciplina.- Susurra en mi oído abrazo mi cintura.
-No soy sumisa, no puedes exigirme algo en lo que no me he involucrado aún masón.- Y este quien se cree? Que tome puesto.
-Se mi sumisa Abigail.- Propone, respondo negativa, aún no conozco lo suficiente.
-No quiero, aún no Masón.- Lo abrazo y así quedamos.
Luego nos vamos del club sin antes pasar a hablar con Lauren, quedamos en un cita de yo ir en dos días, si las cosas van bien me darán mi tarjeta o identificación de básica.
-Vine en mi auto.- Le digo al verlo dirigirse a un Ferrari.
Se voltea a mirarme- Te pregunté?.- Responde Masón con una ceja alzada.
-No, pero para que sepas que no me iré contigo.- Me cruzo de brazos acercándome unos pasos a él.
-Bien, mañana te quiero ver, no te niegues así tenga que arrastrarte te buscaré.- Acorta la distancia y me besa.
-Pero si no quiero, no me puedes obligar.- Lo miro.
-Iremos a cenar muñeca, luego te dejaré en tu casa.- Qué hombre, y si lo tiro por un muelle? Nel, no quiero pasar años en la cárcel.
Tomamos caminos diferentes a casa, cuando llegó me ducho parece que tengo un cartel que dice sexo desenfrenado. Me pongo mi pijama de unicornios, para amarrar mi cabello. Solo quiero descansar, esas posiciones son cansinas, ya me veo haciendo ejercicio para no quedar de piedra.
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